martes, 21 de marzo de 2017

4. RIESGOS DEL PATRIMONIO DOCUMENTAL

El tratamiento de la sustentabilidad del patrimonio documental pasa por el reconocimiento de los riesgos que enfrentan los documentos y sus repositorios. Al respecto, en la historia de la humanidad hallamos múltiples ejemplos de pérdidas por destrucción o daños infligidos a piezas documentales, a veces como efecto de desastres naturales, o por acción de individuos que actúan con sustento en creencias ideológicas, o con justificaciones que sirven para mantener las fronteras de la ignorancia y la ingenuidad en las comunidades o en grupos determinados.
Pero hay otras causas para que estos incidentes ocurran. Así, una de las miradas que escudriñan para entender por qué se abandonan los documentos que heredamos del pasado es la de Juana Inés Abreu, quien en el año 2001 expresó que "los incendios, mutilaciones e inundaciones no son los únicos enemigos de los fondos contenidos en las bibliotecas, pues continuamente se tiene que luchar contra la ignorancia, la avaricia, la barbarie y la indiferencia para proteger los acervos que constituyen el patrimonio bibliográfico de nuestro país".
Tenemos así que en las últimas dos décadas se ha incrementado la vulnerabilidad del patrimonio documental que posee el gobierno mexicano como consecuencia directa de los recortes presupuestales y los adelgazamientos de las plantillas de recursos humanos. Entre los casos que se llegan a conocer, encontramos que en 1999 se levantó formal denuncia por el robo de documentos históricos en varios archivos del Gobierno del Estado de México. Sin embargo, en marzo del siguiente año el denunciante declaró a la prensa que había recibido amenazas de la administración estatal, además de que lo acosaba el ministerio público para que desistiera su monitoreo de la denuncia. Desconocemos si alguna vez se encontraron esos documentos.
Esta situación no sólo ocurre con documentos históricos, pues en el año 2001 regidores interinos de Ciudad Juárez, Chihuahua, reclamaron públicamente que los regidores de la anterior administración municipal se llevaron los archivos de sus distintas comisiones, por lo que dejaron la instancia gubernamental sin ninguna información para dar seguimiento a los casos de interés de la comunidad. Esta misma situación ha ocurrido innumerables veces en México, siendo uno de los casos más sonados el saqueo de archivos de papel y electrónicos que perpetró la administración de Óscar Espinosa Villarreal cuando dejó la última regencia del Distrito Federal en 1997.
Otro caso ocurrió en el año 2005, cuando la periodista Julieta Riveroll comentó que las librerías de viejo de la ciudad de México tenían en venta libros con sellos y papeletas de préstamo de bibliotecas públicas y bibliotecas universitarias de la UNAM. Al respecto, señalaba  que ni las bibliotecas públicas ni la Universidad Nacional habían presentado alguna vez denuncias penales por robo de libros. Asimismo, que en el caso de la UNAM no se consideraban estas sustracciones como delictivas para su presentación en el Tribunal Universitario.
Más recientemente, en el año 2015 Claudia Sánchez, de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural del INAH, calificó de "patrimonio en riesgo" a los archivos fotográficos del país. Señaló que esto se debe en parte a que las fotografías no están contempladas, o no se les indica con claridad en la legislación vigente para el cuidado del patrimonio documental. Esta preocupación tiene un ejemplo ese mismo año con el libro Mexican crime photographs from the archive o Stefan Ruiz, realizado por el artista Ruiz con fotografías robadas en los archivos policiales mexicanos, las cuales encontró a la venta en una caja de fotografías que halló en un mercado; a esto siguió el aprovisionamiento del vendedor, quien le siguió llevando fotografías durante el siguiente semestre.
Si todo fueran sólo robos de documentos y saqueos en los repositorios, se tendría que el problema principal sería la inseguridad, pero no es así. Esto lo podemos notar en la siguiente gráfica de riesgos del patrimonio documental.
Gráfica 1. Riesgos del patrimonio documental
La agrupación de las situaciones de riesgo es acorde a la segunda gráfica de nuestra anterior entrega. Es de notar que la preservación del patrimonio tiene el mayor número de casos conocidos, y ello puede deberse a la carencia de legislación y normativas actualizadas y claras para referirse a este particular. Asimismo, porque en materia de preservación es donde se pueden detectar mayores situaciones que se presentan con motivo o por omisión de los implicados.
Es de llamar la atención la gran cantidad de casos de repositorios documentales que hay en México que no cuentan con un control físico en sus dos herramientas básicas: inventario y número de inventario. En algunos casos, como en el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, esta situación es de gran peligro y de llamar la atención principalmente en sus escuelas y centros de investigación, donde desde hace mucho se ejecuta un saqueo hormiga por parte de la burocracia sin que nadie pretenda evitarlo, pues todo queda en familia.
Recientemente, los procesos de digitalización en las organizaciones se han convertido en un riesgo potencial para la permanencia de los originales, como es el caso del Archivo de Concentración del Poder Judicial del Estado de Michoacán, en donde se están digitalizando los expendientes, y no ha faltado algún funcionario que pretenda que se destruyan los originales que hayan recibido este proceso.
El mercadeo ha sido un gran problema para los repositorios mexicanos, pues la falta de experiencia y pericia de quienes están a cargo de su ejecución ha llevado a que se olviden documentos originales en las imprentas, se digitalicen volúmenes sin el debido cuidado, o se dé mucha notoriedad a los documentos sin instalar las medidas de seguridad que impidan su robo.
Tenemos entonces que la sustentabilidad del patrimonio documental en México sólo se podrá realizar en aquellos casos en que se emprendan procesos para evitar los riesgos. Esto es, cualquier medida que se lleve a cabo sin considerar los riesgos potenciales en que se ponen los documentos, estará enfilada a fracasar, y luego a ocultar ese fracaso. Hay subyacente una lógica trágica que impera en los repositorios del patrimonio documental y con los mismos documentos que hay en México, la cual fue explicada por el historiador Luis González hace años, cuando afirmó que a los mexicanos no nos interesa que nos roben nuestro patrimonio, pues tenemos tanta gente creativa en este país, que sigue produciendo, por lo cual siempre habrá mucho más de lo que se puedan llevar los ladrones.
Y es que ante esta lógica, no hay modo de tener un patrimonio documental, por lo que este asunto debe abrirse a la reflexión pública.

domingo, 12 de marzo de 2017

3. SUSTENTABILIDAD DEL PATRIMONIO DOCUMENTAL: CONCEPTOS

Hace 30 años, se viene promoviendo en México que los repositorios documentales se vuelvan organismos sustentables, y en particular se fomenta que lo sean las bibliotecas públicas. Esto es así porque en la ideología capitalista la sustentabilidad se ha planteado como benéfica desde distintas posiciones, siendo una de ellas la que considera que se trata de la capacidad del organismo de satisfacer sus necesidades actuales en una relación equilibrada con el entorno y sus recursos, y sin comprometer o perjudicar las generaciones futuras para que puedan satisfacer las suyas.
Es preciso notar el sentido que cobran desde su ideología fundante las expresiones "satisfacer sus necesidades actuales", "relación equilibrada", "entorno y sus recursos" y "sin comprometer o perjudicar", pues son determinantes de las acciones posibles para lograr la sustentabilidad. De esta manera, ¿cuáles son las necesidades actuales según el capitalismo? ¿Las necesidades de información son sólo carencia de documentos e información que se resuelve mediante el consumo? ¿Qué se entiende por una relación equilibrada cuando en las sociedades existen formas de discriminación? ¿Cómo se determina el entorno y sus recursos en los regímenes de propiedad privada? ¿Se entiende que la intervención del entorno debe ser mínima, o renovable, o reversible para no comprometer o perjudicar?
A partir de estas nociones, la sustentabilidad se plantea para los repositorios documentales desde tres trincheras:
  • La digitalización, que es vista como el primer paso para preservar el conocimiento y la documentación original con base en la sustitución del soporte y/o formato, con el fin de mantenerlos para las futuras generaciones.
  • El financiamiento y el mercadeo, para asegurar que fluyan los recursos necesarios para asegurar la realización de proyectos con los documentos que sean patrimonio.
  • La permanencia física de los documentos con valor patrimonial, que puede lograrse a través de la realización de proyectos como los siguientes:
  1. Rescate
  2. Identificación
  3. Evaluación del estado físico-biológico
  4. Estabilización para conservación
  5. Registro documental
  6. Digitalización
  7. Almacenado
  8. Difusión, con circulación y uso del sustituto digital disponible
  9. Gestión documental a partir de políticas

Cuando nos aproximamos al estudio de estos tres enfoques, notamos que no están reñidos, sino que se complementan bastante bien, como puede verse en la siguiente gráfica.
Gráfica 1: Sustentabilidad del patrimonio documental
Vemos que las sociedades contienen universos documentales que les son característicos a partir de sus respectivas culturas. En cada una de esas sociedades, se atienden necesidades sociales, económicas y políticas a través de mecanismos que hacen que fluyan los recursos. Al respecto, existen recursos materiales que identificamos como documentos, los que cuando se patrimonializan son mantenidos en repositorios que tienen denominaciones destacadas. En estos sitios, se les mantiene y aplican diversos tratamientos para garantizar su permanencia física y/o para cambiar de soporte su contenido, considerando para ejecutarlo que existe un esquema de políticas públicas, legislación y normas establecidas, así como las formas de gestión documental aplicables.
Lo que la sociedad decida hacer con su universo documental, y en particular con su patrimonio documental, puede ser clave para lograr un desarrollo sustentable, esto es, para que las generaciones futuras también se beneficien del universo documental que reciban y el cuál puedan acrecentar.
Podemos ver también que existen entidades poderosas que despojan a las sociedades de determinados bienes que conforman su universo documental, lo cual pueden hacer mediante el robo, la usurpación, o la violación. Algunas de estas formas de despojo se han establecido dentro del capitalismo mediante transferencias de la propiedad de los documentos, que a veces son patrimonio documental declarado, con el argumento de que estarán mejor cuidados por esas entidades poderosas.
Nótese en la gráfica anterior que en el esquema de la sustentabilidad se propone a los repositorios establecer un intercambio de proyectos por recursos, esto es, que ellos deben elaborar proyectos sobre los asuntos indicados supra para justificar sus requerimientos y a fin de que les lleguen los recursos materiales, financieros o de otro tipo que necesitan para su implementación, mantenimiento, mejora, o desarrollo.
La siguiente gráfica aclara más los tres componentes de la sustentabilidad.:
Gráfica 2: Componentes de la sustentabilidad
Un asunto de suma importancia es conocer quién aporta los recursos para que fluyan hacia la permanencia física y la sustitución del soporte, lo cual se aclara en esta última gráfica. En particular, en México tenemos una situación de dependencia en muchos importantes repositorios, a los que no se les permite ni siquiera recibir directamente recursos financieros que llegan por donación, además de que en muchas ocasiones tampoco pueden administrarlos. Este es un gran obstáculo para lograr la sustentabilidad, y mientras no se dé más autonomía a los repositorios para obtener y gestionar los recursos que puedan conseguir de los sectores estatal, social o privado, la sustentabilidad será una quimera.
Este primer acercamiento a la sustentabilidad nos muestra cómo, desde la ideología capitalista, deben hacerse diversas acciones para conseguirla. Dado que ahora México es un país capitalista con un sistema de gobierno que privilegia el modelo económico neoliberal, es imperioso un posicionamiento realista de los responsables de los repositorios que conforman el universo documental, no sólo en las instituciones destacadas, sino en todas las que posean patrimonio documental, a fin de atender el compromiso de que se mantengan los soportes y contenidos documentales para que las nuevas generaciones tengan también oportunidad de sobrevivir y desarrollarse.